A Chile, la enseñanza basada en la Presencia y Cercanía arribó en 1911, al nacer el Instituto Chacabuco de Los Andes. En el Diego, ya son 81 años los que han sido iluminados a través del carisma de San Marcelino. Humildad y Sencillez al estilo de la Buena Madre representan una oferta educativa atractiva para muchas familias de Quillota.

Nuestro colegio vivió la pasada semana el encuentro de jóvenes reunidos en alianzas. Alegría, camaradería, trabajo en equipo, divertidos concursos llenaron de color estos días dedicados a recordar la obra de los Hermanos.

El día miércoles 3 de junio, nos congregó una entretenida Maratón en la que dividimos a nuestras huestes en dos categorías. La primera contempló a atletas de séptimo a primero medio, los que llegaron hasta el Parque Aconcagua; la segunda, atletas de segundo a cuarto medio, que llegaron hasta El Edén.

También se destaca “La Comparsa de Disfraces” que marchó por Quillota. Más de mil personas en caravana se desplazaron por calle Diego Echeverría hasta llegar a la Avenida Condell.

Detuvimos el tráfico, bailando al ritmo de nuestra Batucada en dirección a la Plaza Los Ceibos. Ahí nos tomamos una fotografía que ilustra el espíritu que se percibe en este longevo y humilde El espíritu de un colegio marista es el espíritu de familia. Eso nos dice nuestro fundador.

Esta Semana Champagnat, la familia del Diego disfrutó por igual: alumnos y profesores, apoderados que ayudaron a confeccionar un disfraz novedoso… todos fuimos parte de un solo corazón y de un mismo espíritu.